Un niño de cinco años fue la víctima fatal de una serpiente coral, que alcanzó a morderlo en un pie y quien luego de su traslado al Hospital Chiquinquirá falleció al no recibir el antídoto al mortal veneno.
Según publica el diario La Verdad, el niño jugaba en su casa, ubicada en La Cañada de Urdaneta en el estado Zulia, cuando fue víctima de este reptil rastrero, de inmediato los familiares al darse cuenta lo llevaron al hospital en la entidad, de donde fue referido al Chiquinquirá, pero allí los médicos de guardia no pudieron hacer nada por él, por no contar con el suero antiofídico, por lo que a los pocos momentos de su ingreso sufrió un paro respiratorio.
Estos sueros no se producen en el país y tienen que ser importados de otros países como Colombia, Brasil, México y Costa Rica. Eventualmente son donados. Sus precios en el mercado alcanzan altos costos.
NAM/La Verdad
