miércoles 8 de mayo de 2024

¡EN VIDEO: ASÍ OPERAN POR LA MADRUGADA! Lluvia de choros azota el sector Ayacucho al noroeste de Maracaibo (VIDEO)

Lo primero que perdieron fue el temor a Dios, pero hace rato. Lo segundo que perdieron fue la vergüenza y el miedo. Para ellos no vale cámaras de seguridad, o que la persona a la cual seleccionan para robar sea familiar de un policía, de un militar, de un cura, de quien sea. Les vale madre, como dicen los mexicanos. Son como 20, aquí salen entre 7 y 10 de ellos.

Estudian su objetivo varias veces. No es un robo al azar, no son ningunas ‘conchas de ajo’ saben lo que hacen y a lo que van. Pasan varias veces, dos, tres y hasta cuatro veces por la madrugada frente al inmueble, observando el movimiento, viendo cada luz que se prende o se apaga en plena madrugada, hasta que deciden actuar.

Como los gatos, trepan los bahareques, y se saltan la cerca cayendo sigilosamente en el interior de las casas. Pareciera que portaran las almohadillas que tienen los felinos en la planta e sus patas que les permite pasar inadvertidos a la hora de asechar y cazar. Así son ellos, caen y nadie los escucha.

Salta el primero y camina pegado a la cerca, con sigilo, pero con arrojo, seguro de sí mismo, como quien conoce el camino. Cuando éste desaparece de la cámara, salta el otro y asume la misma postura y así van saltándose hasta que los siete o los diez ya están dentro.

Una vez dentro, no los invade el nerviosismo, el temor, no se notan apurados, desesperados, en absoluto. Su conducta es serena. Observan, abren puertas, abren neveras, mueven mesas, quitan cosas, meten en bolsos, caminan observándolo todo ¿Será que son tan mensos que no saben que hay cámaras de seguridad grabándolos? Pues pareciera que lo ignoran, pero la sinvergüenzura con la que actúan denota más bien que les vale un huesito de chabacano que haya o no cámaras en el sitio.

Allí pueden pasar de 10 a 20 minutos curucuteando sin que eso represente en ellos alguna preocupación.

Atentos al noroeste

Es la invasión de choros que pululan en el noroeste de Maracaibo. En este caso, fueron tomados en una panadería y luego en una vivienda del sector Ayacucho, muy cerca de Residencias La Florida, más o menos por las zonas del Instituto Universitario de Tecnología de Maracaibo IUTM.

La denuncia la hacen varios vecinos, víctimas de robos recurrentes que desde el día 8 de junio han recrudecido de forma alarmante.

La última casa donde saquearon, fue un inmueble donde funciona una pequeña panadería, cuyos patios grandes colindan con otra casa de la misma familia que también aprovecharon para arrasar hasta con el agua de los materos.

Lo más intimidante de todo es que se trata de muchachos jóvenes que apenas algunos están arribando a la mayoría de edad, por no decir que algunos sean aún menores.

Sectores Ayacucho, La Rosaleda y 14 de Noviembre son los más azotados por esta bandita de muchachos que de choritos de manguera pasaron a convertirse en verdaderos ladrones profesionales o al menos en vías de serlo.

El vecino afectado, ofreció el material que recogieron las cámaras de seguridad y las enviaron a esta redacción con el objeto de que todo el mundo les vea la cara y los identifique, pues ninguno se preocupa por ocultar su identidad, cero pasamontañas, cero máscaras, ni barbijos aprovechando el COVID-19, nada, a rin pelado como se dice en el argot popular, con la cara bien lavada.

El primer material enviado fue tomado el pasado día 8 de junio en la residencia situada al lado del colegio Panamericano, sector Ayacucho, diagonal al edificio Falcón de Residencias La Florida.

Vaya además el llamado a las autoridades policiales; CPBEZ, SIPEZ-CPBEZ; SIP-Polimaracaibo, CPNB, a que instruyan comisiones para abordar la zona. De seguro en cualquier de estas madrugadas los pueden sorprender infraganti.

NAM