El representante de la UNESCO en México, Frédéric Vacheron, advirtió que el brote de coronavirus es una gran crisis para la educación ya que 1.500 millones de alumnos de 165 países se ven afectados por el cierre de escuelas.
«El brote del COVID-19 no es sólo un problema sanitario de gran magnitud», dijo Vacheron en un comunicado difundido por el organismo, sino que también es una «gran crisis para la educación».
Explicó que esto se debe a que por el COVID-19 la educación debe ser a distancia y por ello niños y jóvenes corren mayor riesgo de exclusión y rezago educativo.
Aseguró además que el personal docente también sufre importantes repercusiones en lo laboral y lo profesional mientras que el personal no docente representa «el sector más vulnerable» por la posible reducción de puestos de trabajo.
La Directora General de la UNESCO, Audrey Azoulay, reconoció la experiencia de México en materia de educación a distancia, a través del programa «Aprende en Casa» para mantener la prestación de servicios educativos a través, tanto de la televisión como de internet.
NAM/EFE
