El camino a la Copa del Mundo Qatar 2022 ya comenzó para la Vinotinto. Rafael Dudamel, seleccionador venezolano, compadeció ayer ante los medios de comunicación para presentar la planificación venidera pensando en las Eliminatorias Sudamericanas y los torneos de inferiores y el proyecto que lleva como nombre: “Qatar 2022. Objetivo de todos”.
Dentro de la planificación, con el Sudamericano sub.20, la Copa América y las eliminatorias de por medio, se afirmaron cuatro partidos amistosos contra Colombia y Panamá en Septiembre en Estados Unidos y dos más en Barcelona (España) contra Emiratos Árabes Unidos y la selección de Cataluña.
Dentro de todas las frases que dejo Dudamel en la rueda de prensa, destaco las siguientes:
“Para clasificar al Mundial tenemos que hacer cosas distintas. Es un sacrificio de todos”.
“Con once no nos va a alcanzar. Necesitamos de todos. En lo deportivo, la empresa privada, dirigentes, administrativo”.
«Hubiese sido fácil quedarnos en la casa, como subcampeones del Mundo. Es algo que nadie nos iba a quitar. De igual forma asumimos este nuevo compromiso de la sub-20 con jugadores de años 1999, 2000, 2001».
Dentro de todo lo antes mencionado, creo que la segunda frase de Dudamel es la que toma mayor relevancia. Más allá de lo que pueda plantear un entrenador y ejecutar un grupo de futbolistas, Venezuela necesita el apoyo a nivel administrativo y de la empresa privada en cuanto a logística de trabajo e inversión económica para poder construir un proyecto que apoye lo que el actual seleccionador está proponiendo. Para poder darle continuidad a lo conseguido en la Copa del Mundo Sub-20 en Corea del Sur el año pasado y darle la oportunidad a todos los jóvenes venezolanos de poder contar con lo necesario para que pueda convertirse en un futbolista preparado. Comenzar desde la sub-8 hasta la selección absoluta. Ofrecerles a todos un contexto positivo para que estos puedan crecer. Y no solo quedarnos en lo futbolístico, darle apoyo a nivel integral y en su crecimiento personal como individuo.
El proyecto, para que podamos clasificar por primera vez a la Copa del Mundo, se puede basar concretamente en una idea de juego y en el convencimiento de un grupo de jugadores que están capacitados para lograrlo. Pero si la idea es tener un plan para convertirnos en un equipo asiduo en los Mundiales, necesitamos un proyecto donde todos colaboremos y que les demos la oportunidad a los jóvenes de poder crecer y a los entrenadores de poder capacitarse. Cómo dijo Dudamel, con quien concuerdo completamente, “Necesitamos de todos”. Hoy la Vinotinto necesita de toda Venezuela. Desde el estado hasta la empresa privada. Para Qatar 2002, y para el resto de las Copas del Mundo, todos debemos trabajar.
Javier Parra Peña
NAM
