En el 2016 empecé a escribir un mensaje para mí. En aquel momento era un recordatorio de lo aprendido en la semana y que era compartido por whatsapp con un número limitado de personas.
Escribir se volvió un hábito; escribir sobre el éxito, fracaso, emociones y cualquier tema que tuviera que ver con aquello resaltante en la semana, todo lo que de cualquier manera me ayudara a seguir avanzando, a recalcular, a tomar decisiones consciente.
Si hay algo que quieres hacer ¡Hazlo! En el camino van a aparecer los «realistas» (aquellos que te dirán que aterrices y que no es posible hacer lo que quieres). El tiempo, dinero, país, en fin los realistas; aquellos que llenan sus cuentos para no atreverse al realismo. ¿Sabes? la gente que logra cosas extraordinarias está lejos de ser realistas.
También te vas a encontrar gente que dice: «Si crees que es posible tienes que hacerlo», en lo que pueda ayudarte lo haré, si lo ves claro ¡Persíguelo y lógralo! Así que es una decisión no solo a quien decides escuchar, los primeros te desafían y retan a lo no posible para ellos, los segundos también te retan porque desde el apoyo se acaban las excusas.
Agradezco a los que me han dicho: ¡Estás loca! ¡Eso no es posible! Para ellos en algún momento he sido referencia de persistencia y constancia. Se llama «El poder de la actitud» Agradezco a los que me han impulsado incluso, cuando ni yo estaba convencida.
Estoy celebrando mi primer libro gracias al impulso de muchos de ustedes lectores y replicadores de mis mensajes, esos que escribo cada semana para auto ayudarme y de réplica apoyar a otros.
¿Sabes? No se si voy a lograr todas las cosas que me propongo, pero algo sí te digo, voy a averiguarlo.
@SOYLAURALAROSA
NAM
