¡EL MENSAJE DE LOS LUNES! ¿Llegamos a un acuerdo? || Laura La Rosa Colmenares

¡Yo quiero esto y tu quieres esto otro! Aunque no lo tengamos consciente, en nuestro día a día estamos en procesos de negociación y generación de acuerdos. Mira en tus relaciones más cercanas ¿Qué pasa si quieres ir al cine y tu pareja quiere ir a comer helado? en el mejor de los casos tal vez van al cine y al salir van a comer helados, pero no tienes ambas cosas en el mismo momento, ni cómo lo quieres.

Usando el mismo ejemplo: Supongamos que una de las partes no quiere ir al cine o no quiere el helado, tal vez el punto común es tener un momento para disfrutar en pareja, puede que la conversación requiera otras cosas para lograr ese acuerdo. Se acuerdan fechas, lugares, momentos, pero, lo que quiero reflejar es que cuando dices que sí, estás dando tu palabra y su cumplimento crea un sentido profundo de conexión y confianza.

¿Qué pasa cuando la generación de ese acuerdo trasciende a grupos?  son mucho más que simples transacciones o compromisos superficiales. Representan la voluntad de las partes involucradas para encontrar un terreno común, reconocer y abordar las necesidades y deseos de los demás, y trabajar juntos hacia un objetivo común.

Es importante reconocernos mutuamente como seres con deseos, sueños y perspectivas únicas, y comprender que nuestros caminos se entrelazan en la búsqueda de nuestras metas individuales y colectivas y es allí donde los acuerdos tienen sentido.

Necesitamos  trascender el egoísmo y la competencia desenfrenada. Darnos cuenta de que no somos seres aislados, sino seres sociales que dependen de la colaboración y la cooperación para alcanzar metas más grandes de las que podríamos lograr solos. Sigamos creando relaciones basadas en la confianza y el respeto mutuo.

Un acuerdo no significa que tu expectativa esté satisfecha en un 100% y si que fuiste parte de una conversación donde diste tu palabra sobre algo a lo que le dijiste «Sí» y es allí donde tu sello y tu marca personal son el reflejo.