La policía ya le tenía la lupa encima, estaba sitiado y era cuestión de tiempo para atraparlo. Fueron funcionarios del Centro de Coordinación Policial Maracaibo-Sur CCP#5, quienes, luego de procesar una denuncia por robo a mano armada –lo que estaban esperando- se despliegan en su búsqueda y lo localizan con el objeto robado en la cabecera del Puente sobre el Lago de Maracaibo y ahí echan manos de él y lo detienen.
Se trata de un individuo identificado como: Nerio Enrique Primera Peña de 39 años, sobre quien, en horas de la noche del sábado 12 de junio, recayó una denuncia de una ciudadana por la comisión de un robo para lo cual, Primera Peña utilizó un arma blanca con la cual amenazó y conminó a su víctima a que le entregase una pipa plástica de almacenamiento de agua de color azul de su propiedad.
El hecho ocurrió en la vivienda de la denunciante, ubicada en el sector santo domingo, casa 118B-198, en Los Haticos. Una vez que Primera Peña abandona el lugar con la pipa, la víctima acudió al CCP#5 a introducir la denuncia.
En la minuta informativa se detalla que fue en la cabecera del Puente Rafael Urdaneta, donde localizaron al agresor con la pipa robada y el puñal sin mango en el cinto. Se procedió a su detención y a su traslado hasta el Hospital Pedro Iturbe para su inspección corporal de Ley, para luego trasladarlo a la sede policial y detenerlo allí.
Se informó además que, al introducir la identidad del ciudadano ante el Sistema de Identificación e Investigación Policial (SIIPOL) se descubrió que éste tenía prontuario policial por el delito de robo genérico cometido en el estado Trujillo en el año 2006.
Dato importante
En la investigación sobre el proceder de este delincuente, se conoció que el mismo fungía de “líder” de una banda que opera en el sector Los Haticos y que tiene en zozobra a los vecinos de La Ranchería, Santo Domingo, El Chocolate y Corito, donde hurtan, roban y atracan para hacerse de vehículos, tanques de agua, bombas de agua, pipas, cauchos de vehículos, baterías y cualquier objeto que esté a vista y alcance.
Para tales fines, Primera Peña se encargaba de reclutar a menores de edad y mayores de edad ganados para los fines delictuales. Primera Peña tenía a los vecinos bajo amenazas de que si alguien le denunciaba les iba a “cobrar caro”, sin embargo, la dama se armó de valor y acudió a la policía para ponerle punto final a la sinvergüenzura de este presunto delincuente.
El caso está en manos de la Fiscalía.
NAM/Nota de Prensa
