El 2 de julio de 1961, el Presidente de la República, Rómulo Betancourt, colocó la piedra inicial de la unificación de los pueblos del recién creado Distrito Caroní, en una sola ciudad con el nombre de Santo Tomé de Guayana o Ciudad Guayana como ha quedado definitivamente consagrado.
Para la ceremonia oficial, el Presidente Betancourt llegó al aeropuerto a las diez de la mañana y una hora después se trasladó a la zona de Chirica en San Félix. El acto se inició con el “Ejecútese” por parte del gobernador Leopoldo Sucre Figarella, de la reforma de la Ley de División Político Territorial dictada por la Asamblea Legislativa y por medio de la cual se crea el Distrito Caroní con San Félix de Guayana como capital provisional.
Luego se procedió a suscribir la siguiente Acta de Fundación para ser colocada junto con la piedra angular: “Hoy domingo, dos de julio del año mil novecientos sesenta y uno, con asistencia en este lugar: de los ciudadanos Presidente de la República, Presidente y Vicepresidentes del Congreso Nacional, Presidente de la Corte Suprema de Justicia, Comisionado Presidencial para el Desarrollo de la Guayana, Gobernador del Estado Bolívar y del Presidente de la Asamblea Legislativa del Estado Bolívar, el ciudadano y reverendísimo Monseñor Doctor Juan José Bernal Ortiz, Arzobispo de Ciudad Bolívar, impartió la bendición al sitio, donde fue colocado un ejemplar de la presente Acta de la Fundación de Santo Tomé de la Guayana, de la que se levantaron cinco ejemplares más, para la Presidencia de la República, el Ministerio de Relaciones Interiores, el Ministerio de Fomento, la Gobernación del Estado Bolívar y el Instituto de la Corporación de Guayana, habiéndose asentado igualmente en el primer folio del Libro de la Ciudad de Santo Tomé de Guayana, abierto en esta misma fecha, en fe de todo lo cual suscribimos las Actas respectivas”.
Ciudad Guayana vino a ser la urbe contemporánea más moderna y populosa del estado Bolívar y la de mayor tasa de crecimiento interanual. Se inició al calor de la industria extractiva del hierro y se consolida con el desarrollo urbanístico provocado por la transformación y expansión de la industria del hierro a partir de la Planta Siderúrgica del Orinoco y demás empresas afines, la explotación del potencial hidroeléctrico del río Caroní y el desarrollo de la actividad fabril integral del aluminio.
Ciudad Guayana es una macrópli moderna y floreciente que inserta en su contexto territorial con el nombre de Municipio Caroní, a la antigua San Félix de Guayana, en la banda oriental del río Caroní, y a Puerto Ordaz y Matanzas, en la banda occidental.
En Matanzas, asiento de la Planta Siderúrgica del Orinoco, estuvo la errática Santo Tomás (o Tomé) de Guayana, hoy Ciudad Guayana, durante diez años (1637-1647) con el cognomento de “Santo Tomás de Santísimo Sacramento”. El nombre primigenio de Santo Tomás (Santo Tomé es nombre portugués) quiso ser rescatado por el gobierno constitucional de Rómulo Betancourt en 1961 y puesto a la naciente gran ciudad en la confluencia del Orinoco y del Caroní, pero jamás figuró en la Ley de División Político Territorial del Estado. En cambio, es el nombre de Ciudad Guayana el que perdura y se ha adoptado el 2 de julio de 1961 como la fecha de su fundación, aun cuando la verdad histórica apunta hacia San Félix de Guayana o en todo caso, hacia Puerto Ordaz como piedra angular de la urbe que es hoy la capital del Municipio Caroní.
NAM/Crónicas de Angostura