Sucre decide convocar al Congreso Constituyente para que los habitantes del país decidieran los destinos del país, que entre las primeras ordenanzas opta por asumir el nombre del Libertador y nombrarlo presidente.
Se presentaron tres tendencias, una a favor de la anexión al Río de La Plata, entidad territorial que estableció la Corona española en América como parte integrante del imperio español. Otros estaban a favor de la anexión a Perú, y la tercera a favor de la independencia. Triunfó la propuesta de independencia y el 6 de agosto de 1825 se promulgó y se nombró a Sucre presidente de Bolivia.
Se convirtió en el primer presidente vitalicio de la nación altiplánica, por dos años, y desde allí promovió políticas para la liberación de los esclavos y el reparto de las tierras.
NAM/AGENCIA/PATRICIA NÚÑEZ (PASANTE)