Victoria Eugenia Henao, viuda del narcotraficante colombiano Pablo Escobar Gaviria, reveló en un libro que a los 14 años fue víctima de violación y aborto por parte de quien años después de convertiría en su esposo y padre de sus dos hijos.
En el libro, que pronto estará a la venta, Henao confesó que conoció a su esposo en 1973, cuando ella tenía 13 años y él 24 y comenzaba a dedicarse a sus negocios turbios. Su hermano Carlos Mario Henao Vallejos fue quien los presentó.
A los 14 años, cuando ya estaba saliendo con Escobar, hubo un episodio que marcó su vida y se convirtió en un doloroso secreto que pensó llevarse a la tumba pero que terminó relatando en el libro titulado Mi vida y mi cárcel con Pablo Escobar.
Un día que salieron, él la “abrazó y besó” y ella quedó “congelada” por los nervios y sin tener conocimiento de lo que sucedía por el tabú que representaba el sexo en aquella época, reseñó el portal argentino Infobae.
“No estaba preparada, no sentía malicia sexual, no tenía las herramientas adecuadas para entender lo que significaba ese contacto íntimo e intenso”, escribió en el avance del libro publicado en el diario Daily Mail.
Unas tres semanas después de su primer encuentro sexual, comenzó a sentirse “extraña”, pero su inexperiencia no le permitió sospechar que estaba embarazada.
Escobar la fue a visitar unos días después y le preguntó cómo se sentía. Luego le pidió que lo acompañara a la casa de una mujer ubicada en una zona desolada de Medellín.
“Casi inmediatamente, una señora mayor, que apenas me saludó, me dijo que me acostara en una camilla e inmediatamente insertó varios tubos de plástico en mi vientre, los que se usan para canalizar las venas, y simplemente dijo que servirían como prevención“, escribió Henao.
Ella estaba confundida, no entendía de qué se trataba la “prevención” hasta que la mujer le dijo que “podía estar embarazada”. Luego de colocarle los tubos, le recomendó tener cuidado y le “ordenó sacar los tubos una vez que comenzara a sangrar”.
Sin entender, decidió “obedecer en silencio”…
“Los días siguientes dormí con esos tubos extraños dentro de mí y me vi obligada a ir a la escuela de esa manera para que mi madre no sospechara nada”, contó la mujer. “Tenía un dolor intenso, pero no podía decirle nada a nadie. Solo le rogaba a Dios que terminara pronto“.
Tiempo después, siendo esposa y teniendo hijos de quien fue el narcotraficante más temido, entendió que había sido víctima sexual de su marido y que la “prevención” se trató de un aborto, por lo que tuvo que asistir a terapias para superar aquel hecho.
En Colombia, es considerado abuso sexual el tener relaciones con una persona que tenga cinco años menos que el agresor. En ese momento, Escobar era 11 años mayor que Henao.
NAM/Caraota Digital
