miércoles 3 de julio de 2024

¡DETENIDO EN ALEMANIA! Un boxeador de 20 años, el sospechoso del asesinato de la periodista en Bulgaria

La policía de Alemania ha detenido al supuesto asesino de la periodista Viktoria Marinova, de 30 años, cerca de la ciudad alemana de Hamburgo y las autoridades búlgaras afirman que las primeras averiguaciones apuntan a que el crimen no está relacionado con el trabajo de la informadora.

La detención del hombre, de nacionalidad búlgara, se produjo en la localidad de Stade, a unos 45 kilómetros al oeste de Hamburgo. El detenido, de 20 años de edad, habría huido hasta Alemania -donde parece vivir su madre- tras golpear brutalmente, violar y asesinar a la joven periodista en un parque de la ciudad búlgara de Ruse, donde vivían ambos.

Los agentes búlgaros encontraron en la casa del sospechoso en Ruse varias pertenencias -un pantalón y ropa interior- de la víctima, mientras que las muestras de ADN del detenido coinciden con las encontradas en el cuerpo de la mujer, afirmó el ministro del Interior búlgaro, Mladen Marinov. La televisión búlgara Nova TV señaló que el hombre habría reconocido el crimen, que ha generado una oleada de indignación en Bulgaria y en Europa.

Marinova era una presentadora y directora de TVN, un canal privado local, que en uno de sus últimos programas trató un caso de corrupción con dinero de la Unión Europea en Bulgaria. “En este etapa no podemos decir que el asesinato está relacionado con la vida profesional de la víctima”, aseguró a la prensa el fiscal general, Sotir Tsatsarov, aunque matizó que todavía siguen abiertas “todas las hipótesis”.

El sospechoso, que cuenta con antecedentes por robo de metal en 2007, huyó el domingo a Alemania, según datos del ministro del Interior. El fiscal aseguró que ya se han presentado cargos contra el detenido por violación con uso de la fuerza y asesinato, lo que puede acarrear hasta una pena de cadena perpetua.

 

“Siguieron más golpes: el sospechoso entrenaba boxeo. El resultado de estos golpes le provocaron más traumas en el cráneo, lo que unido a que también aspiró sangre le causó la muerte”, agregó Tsatsarov.

El hecho de que la víctima había investigado un caso de corrupción con dinero de la Unión Europea en Bulgaria, con sobornos a empresarios y políticos locales, sugería un posible motivo profesional.

El primer ministro búlgaro, el populista conservador Boiko Borisov, criticó a la prensa búlgara por ofrecer una “imagen negra” del país al vincular la muerte de la periodista con su actividad informativa y especular con que se trataba de un asesinato por encargo. “Si hubiera sido por encargo el autor no dejaría su saliva sobre el cadáver”, argumentó Borisov.

La Vaguardia