Todo comenzó bien temprano con la anunciación de que caería un fuerte aguacero sobre Maracaibo y San Francisco. Truenos, cielo muy nublado y fluctuaciones predecían lo que finalmente sucedió. Se destapó un aguacero que, no fue tan extenso, pero, si muy fuerte con ráfagas de vientos y que generó cortes en el suministro eléctrico en muchos sectores de la ciudad.
Por otra parte, los usuarios comenzaron a reportar grandes inundaciones, principalmente en las zonas vulnerable a consecuencia del desborde de cañadas que trajo consigo que el agua anegara calles, avenidas y viviendas afectando a varias familias.
Una de las zonas más afectadas fue la del oeste de la ciudad. Los barrios Zulia, Samide, Casiano Lossada, Libertador, Raúl Leoni, El Marite, Miraflores, La Rinconada, La Montañita, La Lagunita, entre otros sectores registraron inundaciones por el desborde de la cañada ‘Fénix’.
Los vecinos también señalaron que por la impuntualidad e ineficiencia en el servicio de recolección de desechos sólidos, las basuras que tienen días dispuestas frente a las casas esperando que el camión del Aseo Urbano se las lleve, también fueron arrastradas por las corrientes obstruyendo drenaje y alcantarillados.
Todo el perímetro que confluye en la Curva de Molina, al oeste de Maracaibo se vio bastante afectado por el desborde del afluente, lo cual, evidencia que al menos, esta cañada, requiere de intervención y limpieza.
Por el paso de las ondas tropicales y la formación de dos tormentas tropicales en áreas del Caribe, los pronósticos de lluvias se están cumpliendo. El estado del tiempo sigue parcialmente nublado y no se descarta que en la tarde-noche se destape otra precipitación abundante.
La ‘Fénix’ necesita atención
Según los primeros reportes, el aguacero comenzó a caer alrededor de las 7:00 de la mañana y se extendió hasta las 9:00 de la mañana.
La periodista Mayelis Alvarado informó que «la fuerza de la lluvia y la falta de mantenimiento en la cañada La Fénix provocaron el desborde de la misma, que cruza por todo el barrio Zulia”.
Alvarado agregó a su reporte que «Hasta el momento, no se han reportado víctimas fatales, solo daños materiales. Sin embargo, los habitantes están a la espera de la visita de las autoridades de Protección Civil, para atender a las familias afectadas».
Asimismo, la película se repitió en otros sectores más al noroeste, como los sectores que comprenden la parroquia Francisco Eugenio Bustamante, todo el perímetro del Barrio Simón Bolívar, La Chamarreta y zonas adyacentes.
Se espera que las autoridades municipales agilicen los trabajos de limpieza de cañadas y drenajes, se exige además que cumplan con el cronograma de recolección de desechos sólidos que no están cumpliendo a cabalidad. En la urbanización San Rafael, parroquia Francisco Bustamante, van tres jueves consecutivos que no van a recoger la basura y en dos de ellos, el aguacero ha arrastrado la enorme cantidad de bolsas de basura y cuanto desecho esté en la calle yendo todo eso a parar al sistema de alcantarillados obstruyéndolo por completo.
No respetó zona
Al norte de la ciudad, también se registraron ciertos destrozos. Árboles caídos, cañadas desbordadas, como el caso de Zapara, Las Tarabas en la parroquia Juana de Ávila, donde tendidos eléctricos sufrieron al igual que postes que terminaron en el suelo ocasionando serios problemas en el ya maltrecho servicio eléctrico.
Afortunadamente salió el sol y la ciudad trata de recomponerse. Sin embargo, los pronósticos no son alentadores, las lluvias podrían regresar con la misma o con mayor intensidad.
NAM/Redacción/MicrófonoZuliano/Redes
