El Boca Juniors debutará -este martes- en la edición 2020 de la Copa Libertadores cuando visite al venezolano Caracas, por la primera jornada del Grupo H, con un par de sensibles ausencias y pensando más en su histórico rival, el River Plate.
El entrenador xeneize, Miguel Ángel Russo, no contará con la figura del equipo, el veterano atacante Carlos Tévez, ni con Eduardo Salvio, a los que reservó para el decisivo y último choque de la Superliga argentina, en la que espera arrebatar el título a River.
Tampoco viajó a Caracas Mauro Zárate -un sustituto natural de Tévez-, víctima de una inflamación en el tendón distal del bíceps femoral izquierdo.
Así, es probable que Russo opte por una dupla de ataque con Ramón Ábila y el venezolano Jan Hurtado, que ya anotó contra el Caracas por la competición doméstica venezolana cuando vistió la camiseta del Táchira.
Otro que parece tener el puesto asegurado en el debut copero es el volante Nicolás Capaldo, con quien Russo buscará apuntalar la ofensiva de Boca.
La delegación argentina de 21 jugadores arribó a Venezuela cerca de la medianoche del lunes a través del aeropuerto de Maiquetía, el principal del país y que sirve a Caracas.
Allí, les practicaron un control sorpresa para descartar el coronavirus antes de que se trasladaran a un hotel del este de Caracas.
El Rojo en gran forma
Contrario a Boca, el local jugó con mayoría de suplentes en el último partido de la liga venezolana para reservar a sus principales figuras de cara al duelo de Libertadores.
El equipo del exseleccionador venezolano, Noel Sanvicente, marcha invicto en cinco fechas, con tres triunfos y dos empates, aunque es segundo detrás del Lara, pero llegan en gran estado de forma para su cita internacional.
En los últimos días, el equipo venezolano calentó el encuentro recurriendo a las redes sociales, donde usó la etiqueta #SabránloquéesCaracas, un club que en 2009 alcanzó los cuartos de final -su mejor participación-, con el propio Sanvicente al mando.
NAM/EFE
