La selección de Perú partió, este miércoles, rumbo a la ciudad brasileña de Porto Alegre, donde el sábado se enfrentará a Venezuela por el Grupo A de la Copa América Brasil 2019.
Perú viajó a Brasil con su plantilla completa tras la incorporación del centrocampista Josepmir Ballón, de la Universidad de Concepción chilena, convocado de urgencia por el técnico Ricardo Gareca para reemplazar a Paolo Hurtado, quien sufrió una fractura el último domingo, cuando finalizaba el partido amistoso contra Colombia.
Durante la última práctica en la Videna, Gareca alineó nuevamente al experimentado central Carlos Zambrano, mientras que dejó en el banco al zaguero Luis Abram y al media punta André Carrillo.
Zambrano, jugador del Basilea suizo, se recuperó esta semana de una lesión muscular que le impidió participar con normalidad en los trabajos anteriores y, por segunda jornada consecutiva, conformó la pareja de centrales de Perú, aunque esta vez con Miguel Araujo, del Talleres argentino.
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En el entrenamiento del martes había jugado con Abram, del Vélez Sarsfield argentino, el otro zaguero titular en los últimos amistosos que jugó Perú frente a Costa Rica (1-0) y Colombia (0-3).
Gareca también ordenó el regreso al terreno de juego del extremo Edison Flores, quien jugó junto a Christian Cueva, mientras que Carrillo quedó fuera del equipo principal.
El seleccionador mantuvo, además, una línea de ataque conformada por Paolo Guerrero y Jefferson Farfán, los dos estandartes de Perú, quienes se desempeñaron en un sistema 4-4-2 que al parecer será el que se usará para el debut de este sábado frente a Venezuela.
Tras culminar el entrenamiento de este miércoles en la Videna, la selección peruana pasó a preparar los últimos detalles del viaje que emprenderá hacia la ciudad brasileña de Porto Alegre.
En Porto Alegre, la selección será recibida por dirigentes nacionales y el jefe de seguridad de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), Abel Gamarra, quien declaró desde Brasil a la emisora Radio Ovación que todo está listo para su llegada.
El jefe de seguridad comentó que “el plantel debe llegar directamente a descansar” y solo el jueves se entrenará, por lo que pidió a los seguidores de la selección peruana, que se calcula que serán unos 40.000 durante la Copa América, que mantengan la calma.
EFE
F/Cortesía Diario Líbero
