Reporta Nattional geographic, revista de España, que Erling Kagge, explorador, abogado y editor noruego, fue la primera persona que escaló los dos polos y la cima del Everest. Él pasó cincuenta días caminando en solitario por la Antártida. Esa experiencia le hizo comprender que: «La soledad no se trata solo de evitar el ruido exterior, sino de encontrar el silencio interior, para neutralizar todo aquello que nos perturba…»
Por otra parte, dice la misma fuente, que Rosa Ana Izquierdo, una monja recluida en el convento de la iglesia de San Bernardino de Burgos, expresó en una ocasión: «El silencio, en soledad, es necesario para reconectar con la realidad, sin duda es el terreno fértil del cual nace la creación esencial, para ensanchar el latido de lo que nos rodea…»
No obstante, cuando viviendo en soledad, se produce un dolor (Subjetivo), ésta, la soledad, se convierte en un factor de riesgo, de enfermedad y hasta de muerte prematura. Puede, en cierta forma, considerarse una epidemia social. Se dice que en Europa el 25% de las personas mayores de 65 años, están solas. De 25 estudios realizados en china, algunos revelan que hubo un gran aumento de la soledad, entre 1995 y 2011, por causas diversas.
Ahora bien, creo que la soledad es menos impactante, cuando hay calidad de vida para soportarla, como sería el caso del silencio, en soledad, que expresan los autores de las citas precedentes. Son la expresión de una soledad voluntaria, por necesidad del ser. Pero, en aquellos casos donde la soledad es producto de factores externos, impuestos por necesidad, pero cuyas causas no podemos controlar, parece que esa soledad es dolorosa y perjudicial.
Hay factores que impulsan la soledad, como la compleja realidad socio-política y socio-económica venezolana. Esto lo expresa de manera desgarradora esa película venezolana, de Jorge Thielen Armand, titulada «Soledad» que participó en el Festival Internacional del Cine, realizado en Cartagena.
Allí se expresa un conflicto real por la venta de una vieja casa, próxima a caerse, abandonada por sus dueños, donde ahora se encuentran otros acompañantes, pero con el conflicto entre lo propio y lo usurpado. Es así, que la soledad también se percibe en lo material, aquellas paredes, techos y pisos, que se desmoronan con el paso del tiempo, carcomidos por la soledad.
En los seres humanos la soledad se nota en la mirada lejana, perdida, como buscando algo… Factores como la identidad (Ya no es quien era), la pérdida de la autonomía física y mental, (no me puedo valer por mí misma), el aislamiento social, entre otras cosas, que generan riesgo a enfermedades, como dije antes.
Si esta situación no es atendida oportunamente, por la familia, o por las instituciones competentes, puede llegar a convertirse en un problema de salud pública, lo cual acarrea una mayor demanda de atención especializada y de los recursos humanos y materiales que ello comporta.
En Venezuela hay ausencia de cifras oficiales, o la negación de información que muestren la realidad de la población que se encuentra sola, por el impacto de la migración forzada o por el olvido a las personas que se han quedado en el país.
La Encuesta de condiciones de Vida (ENCOVI) 2022 informa, que la estructura demográfica de Venezuela cambió, porque los índices de envejecimiento se modificaron. Dice que mas de siete millones de venezolanos, se encuentra en condiciones de refugiados y migrantes regados por distintas partes del mundo, población «Que dificilmente vamos a recuperar, los flujos de retorno al país son poco provables, debido a la inexistencia de incentivos para hacerlo».
Pudiera decirse que vivir en un país «hostil» como Venezuela, en la actualidad, (Creo que todos conocemos las causas de esa hostilidad), sin protección social, genera todo un espacio para la ampliación de la soledad. El Director General de la Asociación CONVITE, Luis Francisco Cabezas, ha dicho «Que solo el primer trimestre de 2022 hubo un incremento del suicidio en adultos, … más del 13% de los adultos mayores, de la muestra consultada, viven solos y en condiciones desfavorables, es decir, son poblaciones en riesgo… que el deterioro de la vejez es homogéneo, no se ve solo en la población mas carenciada, sino que ha invadido aquella población clase media y media alta, a quienes les ha tocado hacer algo que en su vida no habían hecho: Pedir».
Estima esta fuente que para el 2022 había en nuestro país, más de seiscientos mil personas en soledad. ¡La soledad, tu compañera deseada o indeseada! ¡Ojo pelao!
NAM/Carmen Rosa Blanco/Educadora
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