Aproximadamente a las 5:55 am del sábado 23 de febrero un accidente de tránsito en la comunidad agrícola Chipi – Chipi de Carúpano, municipio Bermúdez en Sucre, dejó siete muertos y 13 heridos.
El conductor de un camión Ford perdió el control del vehículo por desperfectos mecánicos y se fue por un precipicio, cayendo sobre una vivienda ubicada en la pendiente de la comunidad de Chipi Chipi.
El camión cubría desde hace una semana la ruta de la zona agrícola alta de Carúpano como transporte público pirata.
En el camión se trasladaban 20 personas de las comunidades La Sierra, Buena Vista, Maturincito, Chipi Chipi y del municipio Benítez hasta la ciudad de Carúpano.
Los heridos y fallecidos fueron trasladados al Hospital Santos Aníbal Dominicci de Carúpano.
Colapso
La falta de ambulancias y dotación de medicamentos e insumos en el segundo centro asistencial del estado Sucre se evidenció al ingreso de los heridos.
Una multitud en el área de emergencia que solicitaba atención para sus familiares colapsó el centro asistencial, al igual que la morgue, donde los fallecidos fueron colocados en camillas a la espera del patólogo, para ser entregados cuanto antes, pues no cuentan con cavas de refrigeración.
Los fallecidos fueron identificados como Rosauro Gamboa Guerra (31), proveniente del municipio Benítez; Enemencio Tovar (77), residenciado en Buena Vista; Emiliana Ramírez ( 51), de la Sierra; Jesús Manuel Rodríguez (31), de Maturincito; Manuel Rodríguez (7 años) de Maturincito; Karina Gordoñez (36), residenciada en la Hoyada y Lina del Valle Carmona Brazón (29), de Guariquen.
Familiares de algunos heridos decidieron trasladarlos a centros asistenciales privados, pues el hospital nformó que no contaban con rayos x, laboratorio ni insumos como yelcos, gasas, entre otros.
Apoyo
Cuando se inició la marcha del 23 de febrero, una comisión ingresó al hospital para apoyar a los familiares.
Jesús Villarroel, presidente de Cáritas Carúpano y monseñor Jaime Villarroel, obispo de Carúpano, permanecieron en el centro asistencial para apoyar a los familiares con medicamentos.
También trasladaron a algunos heridos hasta una clínica privada para realizarles exámenes.
Familiares relataron a El Pitazo su dolor. “Es fuerte perder un familiar y más en esas condiciones, cuando uno no tiene dinero para cubrir gastos funerarios. Tienes familiares heridos y en el hospital no tienen cómo atenderlos. Tenemos más de dos horas esperando a la patóloga”, expusó.
En los últimos meses es común observar en el municipio Bermúdez el uso de camiones privados como transporte público por la falta de transporte en la ciudad.
NAM – El Pitazo
