Alrededor de tres millones de dosis de cocaína no llegarán a las calles por cuenta de una operación de la Policía Antinarcóticos colombiana, efectuada en uno de los puertos de Cartagena, donde se incautó un cargamento de 1,3 toneladas justo cuando iba a ser cargado en una embarcación con destino final en Estados Unidos.
Una llamada anónima a la linea de emergencia advirtió sobre el embarque. Los uniformados procedieron a perfilar la carga y hallaron el posible embarque, que se hallaba en esa terminal marítima en un contenedor de 40 pies.
Dicha unidad fue revisada con el sistema de escáner del puerto y el analista pudo observar bultos de gran tamaño, que contenían formas irregulares. Tras interpretar las imágenes, se procedió a abrir el contenedor.
Tras varias horas de labores se verificaron 40 sacos contenidos en damajuanas, encontrando 1.200 bloques a los que se les aplicó la prueba química por peritos. El resultado fue positivo para clorhidrato de cocaína.
La nave, que se prepara para zarpar el sábado, tenía como primer destino un puerto en El Salvador, de donde se iría al fin de su recorrido en territorio estadounidense. La fiscalía neogranadina realiza las investigaciones pertinentes.
El cargamento, según informó la institución, pertenece al Clan del Golfo y representó un golpe de por lo menos 36 millones de pesos a sus finanzas.
En lo corrido del año, la división de antinarcóticos policía nacional neogranadina ha incautado un total de 15,7 toneladas de cocaína en todo el país. El operativo tuvo lugar un día después de que la policía fiscal y aduanera, en un enorme operativo, decomisara 11 contenedores con más de 750.000 elementos falsos de aseo, provenientes de China.
NAM – Semana