Así como lo evidenció Noticias Caracol, estos inmigrantes están dispersos en la zona con carpas y plásticos para refugiarse del clima en la capital.
Según una declaración de la Secretaría de Seguridad de Bogotá, recogida por el noticiero, muchos de estos venezolanos desplazados duermen en la noche en esas carpas, pero en la mañana las desarman.
Residentes del sector temen que vuelva a pasar lo mismo que ocurrió el año pasado en El Salitre, cerca al Terminal de Transporte, donde se instaló un campamento de más de 400 venezolanos.
“A uno le da miedo pasar por ahí”, manifestó un habitante al noticiero tras asegurar que esos cambuches representan un riesgo para su seguridad y la de sus vecinos.
El Distrito indicó al medio que no permitirá que se repita lo vivido en El Salitre, de donde finalmente cientos de inmigrantes venezolanos salieron para ser reubicados en la localidad de Engativá. Este albergue fue desmontado a mediados de enero pasado.
Pulzo
