viernes 3 de mayo de 2024

¡CAE EN 25% EL COMERCIO EN SANTA ROSA! ¿Es lo mismo el ‘verdín’ que la lemna? ¿Qué está causando el ‘verdín’? ¿Qué hacer para erradicarlo?

Santa Rosa de Agua, no solo ha sido la entrada primigenia a Maracaibo y al país entero en épocas de la fundación de esta ciudad, sino que ha sido bastión de fuertes batallas a consecuencia de efectos colaterales o directos asociados a problemas de servicios o a la contaminación del Lago de Maracaibo. Realmente, Santa Rosa es el único lugar de todo el cinturón ribereño que no está de espaldas al Lago, sino más bien, sobre éste, pero a qué costo.

Cuando apareció la Lemna SP por allá por los años 2004, Santa Rosa de Agua fue una de las comunidades, sino la más afectada de todas, porque la vida de sus habitantes gira en torno al lago. Ahora, cuando parecía que la dinámica económica volvía a buscar vientos de ‘normalidad’ y comenzaba a rendir su frutos una nueva aparición pestilente se muestra como sangre de un malherido en el Lago y aleja a los visitantes.

No se sabe con plena certeza si el llamado ‘verdín’ y la Lemna SP sean lo mismo, pero, los efectos que ambos causan son exactamente iguales, desde el punto de vista del daño al lago y sus consecuencias en Santa Rosa como población de agua y de actividad turística.

Sin que hasta ahora se tenga una teoría científica de los componentes bioquímicos de esta nueva floración pestilente en el lago, lo que sí se sabe y lo han confirmado expertos y ambientalistas es que la causa de esta nueva floración contaminante en el lago, no es más que un mecanismo de defensa de éste ante el constante vertido de aguas residuales a sus riberas y de los derrames petroleros que se han incrementado en los últimos días y ante todo esto la falta de plantas de tratamiento para estos líquidos nefastos que son vertidos a diario y a borbotones en el estuario.

ZULIA: La llegada de la lemna paraliza pesca en el lago de Maracaibo - Reportero24

En 2004, la Lemna SP acabó con el turismo y la navegación en el lago || Fueron episodios duros para Santa Rosa

La presencia del ‘verdín’ en el Lago de Maracaibo ha causado un 25 % de disminución de la actividad comercial en Santa Rosa de Agua, una comunidad popular en la capital zuliana por sus palafitos, turismo, restaurantes y pescaderías, que hoy se ven una vez más afectados tras el putrefacto olor que emana el agua.

Además del desagradable hedor, los habitantes de la parroquia Coquivacoa reportaron que esta bacteria se propaga a kilómetros del lugar y se concentra, mayormente, en las orillas del estuario quitándole su belleza natural.

Uno de los comerciantes afectados es José Domador, dueño del local «El Bohío de Charan», cuya especialidad es el pescado y la gastronomía marítima por más de 15 años; sin embargo, expresó que desde hace 15 días, el ‘verdín’ colmó la orilla de Santa Rosa de Agua, lo que ha influido en una disminución de las visitas de turistas a la zona.

«Esta es la primera vez en el año que aparece esto -precisa Domador- después de la pandemia, las cosas mejoraron por acá, sobre todo con el tema de inseguridad por la activación del comando policial y el patrullaje lacustre. Las ventas se activaron. Pedimos ayuda para que limpien o hagan algo con el verdín para que no quiebren los negocios. La pandemia y la crisis nos obligó a cerrar una temporada, nos dio duro”,

El zuliano detalló que tuvo que «ingeniárselas» con promociones y rebajas en su negocio, para así captar la atención de clientes y no quebrar.

Por otra parte, Emanuel Finol vive en el callejón Ayacucho y la parte posterior de su vivienda está a las orillas del Lago de Maracaibo. El habitante mencionó que el mal olor por el ‘verdín’ es intolerable, lo que incluso le ha impedido permanecer tranquilamente en su hogar, por lo que procura estar en otro lado.

Una explicación sobre el ‘verdín’

El presidente de la Fundación Amigos del Bosque, Elio Ríos, informó que lo que se aprecia en el lago es la bacteria microcystis, cuya característica es que se reproduce solo en aguas cálidas.

La bacteria crea lo que denominamos una balza: estaciona el agua, este no se mueve y, por ende, no entra el oxígeno y se crea un proceso anaeróbico, también llamado biometanización. Es un proceso biológico que genera ausencia de oxígeno, y esto es lo que produce el mal olor”.

Señaló que la bacteria llega a las orillas por su crecimiento anormal, debido al exceso de desechos sólidos que son arrojados al estuario zuliano. Estos se convierten en nutrientes que alimentan a la bacteria, que luego se observan en forma de algas en la superficie.

El ambientalista afirmó que los animales que habitan en el lago, como los peces, al ser atacados por el verdín, representan un peligro para la salud de las personas, ya que estos al ingerir esta bacteria pueden producir afecciones gastrointestinales en el ser humano que se come el pescado contaminado.

Esta explicación le suma un elemento más a las causas de este verdor hediondo en el estuario: los desechos sólidos, que éstos vienen desde las cañadas citadinas que, a su vez, son afluentes de aguas fecales en permanente caída al lago.

Asimismo, exhortó a las autoridades gubernamentales a implementar medidas para rescatar al reservorio lacustre, debido a que este seguirá creciendo si no cesan el arrojamiento de desechos sólidos a las aguas y los derrames petroleros.

Verdín, Lenma y memoria corta

El tema del ´verdín’ en el Lago de Maracaibo evoca los días nefastos del año 2004 cuando hizo aparición y se extendió de un modo impresionante, aquella lenteja verde, más o menos del mismo color del ‘verdín’ pero que no era líquida sino una semillita que, al crecer exponencialmente se instalaba en las riberas del lago como una alfombra verde similar al césped de un campo de golf. Ella venía desde abajo, tenía raíces y erradicarla fue todo un desafío.

¿Será que esta nueva bacteria es lo mismo, metamorfoseada ahora en este ‘verdín’? Unas manchas aceitosas, tonalidades verdes, basura, y desechos sólidos petrolizados, son las características que se observan a orillas del estuario y ponen en contingencia su bienestar.

No obstante, la amenaza ambiental no solo afecta la vida marítima del estuario,transportistas de la ruta El Milagro y Los Puertos de Altagracia, que están posicionados al lado del Malecón, pues, los afectados afirmaron que desde hace semanas, el olor del ‘verdín’ era “horrible” y se les dificultaba mucho trabajar así todo el día.

Algas cianófitas

El presidente de la Asociación de Pescadores de Santa Rosa, Emeri Delgado, dijo que la “mancha verde” es peor que la lemna o lenteja de agua, pues deja sin oxígeno al lago y mata a los peces, además de la pestilencia que inunda al sector.

El director de la Fundación Azul Ambientalistas, Gustavo Rangel aseguró en su cuenta de Instagram que, nuevamente, el Lago de Maracaibo se encuentra “colonizado” por las algas cianófitas que además, incrementan la degradación ecosistemática, pero, lo más grave es que, de acuerdo con Rangel, del evento se viene alertando desde hace años.

«Estamos frente a una ‘floración o bloom algal’, una agresiva colonización de esta especie en el ecosistema estuarino del #LagoDeMaracaibo, y lo lamentable, es que ha pasado más de una década en recurrencia sin que se tomen acciones para mitigar el daño ocasionado”.

Rangel sentenció que “La falta de plantas de tratamiento de aguas residuales, el abuso irracional de muchas empresas, que por décadas han vertido residuales contaminantes al lago, sumado a la excesiva materia orgánica que brinda nutrientes, hace que este tipo de fenómenos aparezcan”.

Alertado desde 2012

Según expertos entre ellos de la organización ACLAMA, la cuenca del Lago de Maracaibo requiere alrededor de diez plantas de tratamiento de aguas residuales, pero al parecer solo existen dos en la región.

Recientes investigaciones complementarias al material audiovisual de este reportaje, nos indican que la mancha verde, llamada ‘verdín’ viene propagándose desde principios de 2012.

Según un reportaje de abril 2012, publicado por el diario Panorama esta “mancha verde” recorre silente y a veces desapercibida, pero, causando mucho daño en la cuenca del Lago de Maracaibo. Al parecer se trata de Algas verdeazules (cianófitas) y las llamadas “verdín” pueden llegar a ser tóxicas.

Estas algas verdeazules encuentran su mejor “alimento” en los nutrientes aportados, fundamentalmente, por aguas residuales y restos de fertilizantes, todos éstos ricos en nitrógeno y fósforo.

Son organismos capaces de reflejar las condiciones de los cuerpos de agua. Al parecer en el Lago de Maracaibo prevalece la Anacistys sp y pueden limitar el desarrollo de algunos tipos de fitoplancton, necesario para la vida de varias especies, y disminuir el oxígeno de las capas superiores.

Algunas pueden llegar a ser tóxicas o semitóxicas y se les encuentra en el Lago durante todo el año, pero en muchos casos su densidad ha disminuido por la “competencia” con la lemna por luz y nutrientes. Además, las toxinas producidas por varias de estas cianófitas pueden envenenar a los animales que habitan el ecosistema lacustre o toman el agua.

Un estudio sobre cianófitas abordado entre abril y mayo de 2005 por el ICLAM reveló que la zona occidental concentraba el 64,16%, seguido de la zona Sur del Lago con 19,19%; mientras que en el estrecho se observó un 11,97%.

Caen la pesca y el comercio

El comerciante de la zona y administrador de un restaurante, Alexander Leal, explicó que de un 80% del total de sus ventas, ahora apenas alcanza el 40%; se redujo a la mitad debido al problema del derrame petrolero y la llegada de la lemna. «Los turistas, en vista de la situación, se han alejado un poco».

«Yo le hago un llamado a que prontamente se acerquen por acá a que prontamente se acerquen por acá de verdad, nos preocupa bastante la situación», exigió a las autoridades. También hizo un llamado a que asistan con más frecuencia para sanear las orillas.

Todavía el fenómeno ‘verdín’ al cual asocian de algún modo con la Lemna SP, está en fase de estudio biológico para determinar con exactitud sus composiciones químicas y qué lo alimenta. Pescadores, comerciantes y transportistas lacustres están convencidos de que el ‘verdín’ es consecuencia de los constantes derrames petroleros, pero, lo cierto es que el lago vuelve a estar enfermo, visiblemente herido con su sangre que no es roja, sino verde y maloliente.

NAM/Con información de Versión Final/Ambientalistas

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