Un tribunal jordano sentenció el martes a 10 personas a términos de entre tres años de cárcel y cadena perpetua por sus papeles en un ataque del grupo Estado Islámico contra un popular sitio turístico que dejó 14 muertos.
El ataque de diciembre del 2016 contra el castillo de Karak, en el sur de Jordania, fue la primera vez en que el Estado Islámico reivindicó un ataque a gran escala contra civiles en el país.
El tribunal sentenció a dos hombres a cadena perpetua y a otros cuatro a 15 años de prisión. Cuatro personas fueron sentenciadas a tres años de prisión y un acusado fue absuelto.
La confrontación de Jordania con el Estado Islámico se remonta al 2014, cuando el reino comenzó a lanzar ataques aéreos contra posiciones del EI como parte de una campaña internacional para expulsar al grupo de Siria e Irak.
NAM/AP
