La venta clandestina de gasolina prolifera en El Hediondito al norte de la cuidad de Maracaibo. Esta venta ilegal opera bajo la mirada de las autoridades. Hace tiempo no hace falta salir de Maracaibo para ver los puntos como se denominan estos expendios en la calle, este delito ya no es exclusivo de la frontera, ya forma parte de la capital zuliana.
En un recorrido realizado este viernes por el equipo de calle de www.noticiaalminuto.com en la avenida 23 con la calle 47 de El Hediondito, vía hacia el Hospital de Especialidades Pediátricas de la parroquia Idelfonso Vásquez al norte de la ciudad, se constató que en la referida dirección se encuentran establecidos 10 de estos puntos que venden garrafas de 5 litros a 10 mil bolívares y el pago es en efectivo. El mismo escenario se repite en la calle posterior de la zona, donde la misma garrafa cuesta ocho mil bolívares.
«Billete en mano, cash cash, plata, plata en mano», dijo una mujer wayúu en uno de los puntos cuando se le consultó sobre la forma de pago. Los vendedores están en estado de alerta ante la llegada de algún funcionario; sin embargo no dejan de exhibir en el frente de sus residencias una o dos pequeñas pimpinas de gasolina.
Algunos vehículos se acercan a preguntar el precio y luego emprenden la ida, otros se estacionan y el mismo vendedor hombre o mujer les despacha la gasolina.
Los conductores prefieren comprarla así antes que hacer una larga cola en una estación de servicio, o simplemente se les acaba el cupo para llenar y optan o recurren a este tipo de venta ilegal.
¿Cómo consiguen la gasolina estos puntos? Los conductores de vehículos viejos que tanquean mayor cantidad de litros de combustible van a las estaciones de servicio, cargan sus unidades y luego se las venden a los que bachaquean el producto. Hacen varios viajes bajo la complicidad de los bomberos de las bombas gasolineras.
NAM
Aylen Bucobo/ José Valbuena
