En una homilía cargada de similitudes entre el sufrimiento de María, la madre de Jesús, Dios hecho hombre, y el pueblo zuliano y de Venezuela en general, monseñor Carlos Alfredo Cabezas, desarrolló el mensaje de la palabra de Dios en el marco de la Bajada de la Virgen Chinita.
En medio de una multitud rebosante de Fe y espiritualidad, el Obispo de Punto Fijo señaló que María conoce perfectamente el dolor del pueblo zuliano que vive una de las situaciones más precarias del país con sus múltiples problemas.
Conoce el transito de la migración cuando se fue de su pueblo hacia otro para dar vida al Dios hecho hombre.
Pero además nos enseña vivir en la plenitud de la Fe y la Esperanza la cual nos enseñó desde la anunciación del Ángel que sería la madre de Jesus, cuando dio el sí, un sí que no fue circunstancial sino de vida, compromiso y confianza.
«María baja para escuchar el clamor, caminar junto a su pueblo, darnos luz ante las noches oscuras que vivimos… No estamos huérfanos, tenemos a María que nos protege», señaló el prelado de la Iglesia Católica.
Aseveró que el mensaje de María es claro «Nos dice levántate, mira al horizonte, porque ella es la madre de la Esperanza».
NAM
