Toda la vida ha sido un luchador, como la gran mayoría de los hombres en este país. Luchador tenaz, llevando adelante sus negocios de víveres; fue administrador del condominio del Mercado Municipal de Corito en sus mejores tiempos, pero, por circunstancias de la vida perdió la visión, lo cual no le impidió seguir luchando, ahora desde su trinchera junto con otros con su misma condición. Presidió la Asociación de Ciegos y desde allí ha ofrecido ayuda.
No obstante, hoy está en cama y requiere urgente del apoyo de quienes tengan a bien las posibilidades en razón a que, por una parte, todos conocemos lo costoso que es una medicina, un tratamiento, una intervención, pero por la otra, no hay un Estado que responda ante lo que deben responder. Aquí está la historia de este invidente que es la historia de todos los invidentes en el Zulia, pero antes, su requerimiento.
Se llama Henry Avendaño, es discapacitado visual y requiere donantes de sangre de cualquier tipo, así como también aportes económicos para su intervención quirúrgica. Henry siempre ha sido solidrio con el necesitado. A través de la Asociación de Ciegos y a modo personal gestiona medicamentos e insumos a quienes lo requieran y no puedan sufragar esos gastos. Hoy él es el necesitado.
Para ello, su hija, la periodista Carolina Avendaño Parra pone a disposición los siguientes datos:
- BANCO DE VENEZUELA
- 0102 0160 8600 0058 3857
- Carolina Avendaño
- I: 16.120.519
PAGO MÓVIL
16.120.519
04246372922
VENEZUELA O BOD
¿Qué le pasó a Henry?
Precisamente, Henry venía de regreso a su casa. Visitaba a una señora diabética a quien le fue a llevar unas insulinas para su tratamiento y a un señor a quien le gestionó una consulta cardiológica. Cuando va caminando por la acera y obviamente, por su discapacidad visual no observó una tanquilla de Hidrolago, de esas donde se colocan los medidores de agua, que conecta la tubería a la tubería principal y ésta estaba abierta. Metió su pie en esa tanquilla y se fracturó severamente.
Eso ocurrió el día sábado, 14 de mayo del corriente. Se fracturó el tobillo derecho en tres partes. En el Hospital Central Urquinaona lo atienden, pero, con la escasez de insumos, les exigen algunos de ellos y son bastante costosos.
Su hija Carolina redactó una carta con la cual ha ido a diferentes fundaciones e instituciones buscando ayuda.
El Sr. Henry fue presidente de la Asociación de Ciegos del Zulia, siempre ha sido persona solidaria con quienes necesitan atención médica, gestiona medicamentos e insumos, ahora él necesita de la buena fe y voluntad de quien pueda ayudarlo. Está delicado y debe ser intervenido cuanto antes.
Dignidad al discapacitado
Es propicio este Servicio Público para instar a las instituciones estadales, regionales y municipales a tomar en cuenta a una buena cantidad de personas discapacitadas visuales o de cualquier otra discapacidad que merecen espacios limpios, adecuados y sin obstáculos para desplazarse.
Ahora es común que las aceras se conviertan en estacionamientos, o en sitios donde se montan negocios de víveres y de cualquier otra cosa, obstruyendo el paso peatonal, obligando al peatón a circular por la calle y peor aún si se trata de un invidente.
Por otro lado, debería ser deber de Hidrolago o en todo caso del Estado cubrir los gastos médicos del Sr. Henry, porque no se justifica que haya tanquillas en pasos peatonales públicos abiertas, lo cual es un peligro para invidentes y no invidentes, inclusive para personas mayores o niños.
También es propicio el NAM Solidario para exhortar a la población a no quitar las tapas de las tanquillas o a destaparlas y dejarlas abiertas, pues, están ocasionándole un daño a la sociedad, incluso un propio familiar podría ser el afectado
NAM/Servicio Público
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