El presidente Lenín Moreno ordenó el jueves retirar inmediatamente la seguridad adicional de la embajada ecuatoriana en Londres donde está refugiado el activista australiano Julian Assange.
En un escueto comunicado difundido por la Secretaría Nacional de Comunicación se informó que en adelante esa misión diplomática “mantendrá el resguardo normal similar al del resto de embajadas ecuatorianas en el mundo”.
Ese organismo no dio detalles de la seguridad adicional ni las razones de tal decisión, aunque en los últimos días una publicación del diario británico The Guardian señaló que en esa embajada había agentes encubiertos y un operativo de seguridad para proteger y a la vez espiar a Assange, fundador del sitio especializado en filtraciones Wikileaks.
Este activista se refugió allí hace casi seis años con el fin de evadir ser extraditado a Suecia para responder por acusaciones de delitos sexuales, que él ha negado.
El permanente activismo político de Assange ha comprometido las relaciones de Ecuador con terceros países, por lo cual se le impidió el acceso a internet desde el 28 de marzo después de que publicara mensajes contra Alemania y en defensa del separatismo catalán. Al hacer eso contradijo una solicitud expresa del gobierno ecuatoriano de que evitara pronunciamientos públicos.
Tanto Assange como Ecuador temen que si sale de la embajada se le extradite a Estados Unidos, donde podría ser procesado por filtrar miles de cables secretos diplomáticos y militares.
NAM/AP
