Pese a las críticas, Mesút Özil es un jugador de otro nivel. Cuando aparece, mucho menos de lo que los amantes de este deporte quisiéramos, es un artista. Construye todo con una facilidad y una estética maravillosa, como si fuera una artista delineando una nueva obra de arte. Hoy, en el Emirates Stadium, fue el artificie de la remontada de su equipo, uno de los que está en mejor forma en el fútbol europeo.
Con goles de Özil, Pierre-Emerik Aubemayang y Héctor Bellerín, el Arsenal derrotó 3-1 al Leicester City en un partido correspondiente a la novena jornada de la Premier League de Inglaterra. Pese a comenzar perdiendo con un gol en contra tempranero del mismo Bellerín, el conjunto de Unai Emery no se desesperó y, de la mano de un gran Özil, fue una máquina de jugar, que fue consiguiendo poco a poco los espacios y los goles.
Después de una primera mitad donde el Leicester fue amplio dominador con una propuesta atrevida e interesante, Emery tocó la tecla y acomodó lo que tenía que acomodar. Cambió el sistema y le dio entrada a Guendouzi y Aubemayang acomodando el sistema de salida desde el fondo con el primero y agregando una variante ofensiva en velocidad con el segundo. Más otras variantes como Xhaka de lateral izquierdo. Todo, desde ese ajuste, fue positivo para el Arsenal. Los goles cayeron poco a poco con el pasar de los minutos.
Con la victoria, el Arsenal llega a 21 puntos y asciende al cuarto lugar de la tabla, pero con los mismos puntos que el Chelsea (3ero) y el Tottenham (4to), y extiende la racha de partidos ganando a nueve. No pierde desde aquella derrota 3-2 contra el Chelsea en el mes de Agosto. Por otro lado, el Leicester se queda en la décimo primera posición con 12 puntos y se aleja de la posibilidad de acercarse a los puestos de clasificación a competiciones europeas.
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