sábado 20 de abril de 2024

¡ARROLLADO EN SAN FRANCISCO! Familiares procesan la trágica partida del pequeño José Mario en su humilde casa (Fotos)

Aún yace el manchón de sangre en el brocal junto al hidrante, el inerte testigo de una muerte trágica y por demás dolorosa. Ese lugar donde su pequeño mundo se apagó tras ser impactado por la camioneta conducida por un irresponsable pasado de tragos, marcado quedará como un santuario para los acongojados corazones de sus seres queridos y de todo aquel que lo conoció, pues, allí murió la inocencia, sin culpa, sin razón y sin sentido.

El alcalde de San Francisco, Gustavo Fernández se pronunció anunciando un Decreto de Emergencia Municipal que debe traer consigo medidas extremas para evitar que esto, que tal parece, se salió de control siga ocurriendo, pues, estos accidentes, que no tienen justificación alguna más que la imprudencia e irresponsabilidad de quienes los ocasionan, se han incrementado exponencialmente y es hora de que los gobiernos locales comiencen a proteger a sus ciudadanos y no a los ‘votos’.

Todavía está fresca la imagen trágica del pequeño niño Thiago Finol, quien murió también en medio de un choque de motos por imprudencia. Solo tenía cinco años y su padre de crianza lo llevaba a la escuela a la cual nunca llegó a sonreír, a aprender y a jugar con sus amiguitos. Tampoco lo hará el pequeño José Mario Utrea, de solo 9 años quien, en mala hora, se encontraba junto con su padre en la calle 161 de la urbanización San Francisco, municipio homónimo, en las inmediaciones de la Iglesia San Juan Bautista recolectando botellas plásticas para vender en la calle, sin ninguna necesidad en un país que debiera ofrecerles a sus pequeños espacios para la risa, el juego y el aprendizaje y no para andar en carromatos pasando roncha y recogiendo latas.

Pero, no es el caso. Sus padres, hermanos y familiares se dedican a este oficio para ayudar al pequeño José Mario con sus estudios, ropa y comida, como lo hacen los más humildes hijos de esta Patria de Bolívar. El caso es la imprudencia, porque, de no haber sido por la imprudencia de un pasado de tragos que se estrelló contra la humilde carrucha y contra la humanidad del pequeño hoy fallecido y de los otros heridos, este trágico episodio sencillamente no hubiese ocurrido y hoy José Mario seguiría, tal vez recogiendo botellas, pero con vida y la esperanza intacta.

Los heridos

En el accidente resultaron heridos Fernando Ramos, de 17 años; David Pushaina, de 15, quien se encuentra grave en el Servicio Autónomo Hospital Universitario de Maracaibo (Sahum); José Sandrea, de 15; Johana Molina, de 22; Isaías Medina, de seis, y Guillermo Ramos Solís, de 18 años, informó el alcalde de San Francisco, Gustavo Fernández.

De acuerdo con el periodista Neiro Palmar, quien acudió a la humilde vivienda de la familia del pequeño José Mario, los allegados informaron que el pequeño solía pasar los fines de semana junto a su madre, Gina Utrea, y su padrastro, Alexánder Barrios, conocido como “Marciano”, quienes se dedicaban a reciclar desechos sólidos.

Vida precaria

“El niño solo se la pasaba los fines de semana con su mamá, porque por eso trabajo fuerte ella no podía tenerlo los días. De lunes a viernes estaba con su abuela en Almawin y allá estudiaba. Los sábados y domingo se iba con la mamá”, dijeron los moradores del sector donde residen el padrastro y la progenitora del menor.

“Ellos recogían plástico y aluminio. Su mamá nunca lo dejaba solo. Ella lo fue a dejar a que su abuela el sábado, pero la señora no salió y se regresó con la mamá al ranchito. Ahorita por tema de vacaciones escolares estaba más tiempo con ella”, añadieron.

Se pudo conocer que Gina tenía previsto dejar este martes a José Mario en casa de la abuela.

Risueño, pícaro y travieso

Como todo niño, José Mario era un chiquillo travieso. La inocente picardía que irradiaba en su mirada podía contagiar a cualquiera, pues nada más puro que la mirada de un niño sin importar su condición social.

“Siempre tenía una sonrisa, era juguetón, alegre y buen estudiante”, señalaron los allegados del chiquillo en medio del dolor.

José Mario Utrea tenía dos hermanos, de 13 y 10 años. “Al quien más quería la mamá era a José”, refirieron los vecinos.

Detenido

Por otra parte, se pudo conocer que José Luis Urdaneta Prieto, de 48 años, conductor de la camioneta Ford Explorer de color plata, placas VCN-46I, involucrada en el accidente, quedó detenido y lo trasladaron hasta la sede de Polisur, para las averiguaciones correspondientes, dijo la fuente policial.

NAM/Redacción/Con información de Versión Final/Fotos: Alejandro Paredes

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