jueves 18 de abril de 2024

¡ARDUA LABOR! Forenses levantan cadáveres calcinados por explosión en México

Peritos laboraban hoy en el paraje donde se registró la noche del viernes una explosión por la perforación ilegal de un ducto de Pemex que dejó al menos 67 muertos y 75 heridos en el poblado mexicano de San Primitivo, estado de Hidalgo (centro).

A las 11:00 hora local (17:00 GMT) de este sábado, los forenses levantaron los cuerpos de 63 personas que murieron calcinadas en el sitio y comenzaron su traslado hacia instalaciones cercanas al municipio de Tlahuelilpan, donde se ubica el poblado.

Los peritos recogieron los cadáveres a lo largo de un canal de varias decenas de metros de longitud, donde estaba al descubierto la toma clandestina que el gobierno mexicano atribuyó a ladrones de combustible de ductos de la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex).

El subsecretario de Gobierno de Hidalgo, Juan Luis Lomelí, dijo a Xinhua que ahora las labores se enfocaran en la identificación de los cuerpos en un proceso conjunto entre autoridades y familias.

Expuso que las tareas de los peritos continuarán este sábado, ya que revisarán si en el interior del canal se hallan cuerpos enterrados, debido a que los bomberos removieron la tierra para apagar el incendio que sobrevino a la explosión.

«Tenemos que maniobrar para poder ver si efectivamente hay cuerpos dentro del canal», señaló Lomelí al ser entrevistado en el sitio.

La explosión se produjo la noche del viernes cuando entre 600 y 800 pobladores acopiaban en recipientes el combustible que se fugaba a chorros por la toma clandestina, según el reporte oficial del gobierno mexicano.

Las personas heridas fueron llevadas por los cuerpos de emergencia a hospitales de diferentes localidades, incluida la Ciudad de México.

De acuerdo con los brigadistas de Protección Civil, el estallido afectó unos 400 metros cuadrados del paraje que atraviesa el ducto y donde existe un sembradío de alfalfa.

Más de 120 bomberos de diferentes ciudades trabajaron casi cinco horas para apagar el incendio que tenía llamas de varios metros de altura.

El paraje y el poblado en general amanecieron con decenas de soldados y policías federales resguardándolo, mientras que varios pobladores esperaban identificar a sus parientes entre los fallecidos.

María Isabel, una habitante, contó a Xinhua que temía que dos sobrinas suyas estén en la lista fatal porque no las encontraron en los hospitales, por lo que se preparaba para dirigirse a la morgue.

San Primitivo es un pequeño poblado cuyos habitantes se dedican principalmente a la agricultura y es cercano a la refinería de Pemex en Tula.

Por su territorio atraviesa el ducto que corre desde las costas del golfo de México y Tula, algo que ladrones aprovechan para hacer perforaciones y robar combustible, al igual que en otras localidades.

La tragedia, una de las peores en saldo en las últimas décadas en México, se registró cuando el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador recién lanzó una campaña contra el robo de hidrocarburos en ductos y en instalaciones de Pemex.

NAM – Xinhua