El Papa Francisco ya aceptó la invitación de Andrés Manuel López Obrador para participar en el proceso de consultas para delinear la estrategia en materia de seguridad pública y combate al crimen organizado, que comenzarán el 7 de agosto y terminarán el 30 de noviembre.
El Sumo Pontífice tendrá una intervención a través de video conferencia, como parte de los 40 foros presenciales que se harán en todo el país, y la plataforma digital, donde podrá participar cualquier persona, para que al final se tengan los insumos necesarios con el fin de elaborar el plan de pacificación de México, que va a derivar en distintas leyes y políticas públicas, para presentarlas al Congreso en febrero de 2019.
“No hay fecha para la participación del Papa, pero ya aceptó; también se hizo la invitación al secretario general de la ONU, pero todavía no sabemos; en este caso se está pidiendo que sean ellos y que paguen sus propios gastos de traslado y demás, para que participen y si no que sea un representante”, detalló Loreta Ortiz Ahl, coordinadora de las consultas, que incluirán preguntas sobre una eventual Ley de Amnistía o legalización de las drogas.
Señaló que de igual forma se están preparando las cartas de invitación firmadas por López Obrador para el alto comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, relator especial de Naciones Unidas sobre Desapariciones Forzadas, así como más de 20 organismos internacionales especializados.
Loreta Ortiz Ahl agregó que las consultas que serán escalonadas para la ciudadanía en general, víctimas y expertos, tendrá como eje temático: la reconciliación nacional y la paz del país.
Llamado a evangelizar
El Papa se ha referido al apostolado católico durante el Ángelus de este domingo al manifestar que «un bautizado que no sienta la urgencia de anunciar a Jesús, no es buen cristiano».
Ante cientos de fieles congregados en la plaza de San Pedro, Francisco ha reflexionando sobre el pasaje evangélico del envío de los apóstoles y ha advertido de que «los mensajeros del Reino no son funcionarios ni empresarios potentes».
«Los apóstoles van ligeros porque no son ni manager todopoderosos, ni funcionarios inamovibles, ni divos de gira», ha señalado el Papa asomado al balcón de su estudio privado en el Palacio Apostólico.
En este sentido, ha enfatizado que los apóstoles tienen que anunciar a Cristo con «pobreza de medios», con la única dotación del bastón y las sandalias. Así, ha señalado que el anuncio del Evangelio debe hacerse con un «criterio de sobriedad» porque Dios quiere a los apóstoles «libres y ligeros» pero también «sin miedo».
«Los apóstoles no tenían nada propio que anunciar. Hablan y actúan como enviados, como mensajeros de Jesús», ha dicho el pontífice. Finalmente ha agregado que el «bautismo» es el sacramento que «hace misioneros» a los cristianos.
NAM/Agencias
