El Oleoducto Trasandino, ubicado en el suroeste de Colombia, sufrió un atentado con explosivos que causó un derrame pese a que no estaba en operación en el momento del ataque, informó el domingo la petrolera Ecopetrol.
La explosión se registró el sábado en la noche en zona rural del municipio de Mallama, en departamento de Nariño, fronterizo con Ecuador.
El oleoducto Trasandino, de 306 kilómetros de longitud, tiene capacidad para transportar a diario unos 85.000 barriles de crudo que se producen en los campos del departamento del Putumayo hasta el puerto de Tumaco, sobre el Océano Pacífico, desde donde se exporta.
“Inmediatamente se conoció el hecho, Ecopetrol informó al Consejo Municipal de Gestión del Riesgo y Desastres de Mallama y desplazó personal calificado hacia la zona a fin de atender de manera efectiva la situación”, dijo la petrolera en un comunicado.
La empresa no responsabilizó inmediatamente del ataque a ningún grupo armado ilegal.
En la región, con extensos cultivos de hoja de coca y laboratorios para producir cocaína, tienen presencia la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y bandas criminales que se disputan el control territorial.
Frecuentemente el ELN ataca la infraestructura petrolera y energética del país sudamericano, dentro de su lucha contra el Estado.
El jueves pasado esa guerrilla hizo explotar un coche bomba en una academia policial, que dejó 21 personas muerta y 68 heridos, en el peor ataque en la historia reciente del país.
Se trata del primer atentado que sufre el Trasandino en lo que va del año. Durante el 2018 la tubería recibió 16 ataques de este tipo.
Otro oleoducto, el Caño Limón-Coveñas, ha sufrido tres atentados en lo que va de enero.
NAM – Reuters
