Este año como el anterior, no habrá torta en la casa, no se reunirán para compartir la alegría de la vida, este encuentro será sustituido por el más profundo dolor, ante la pérdida irreparable de uno de los seres más queridos del hogar Ramírez Pineda, que justo hoy cumpliría 81 años, pero que el vil sentimiento de la ambición del aprovechamiento de la ocasión y de la maldad intrínseca de algunos seres humanos cortó de manera brutal, dejando un hondo pesar a sus familiares que hoy reclaman justicia por el ruin asesinato al que sufrió días previos a su cumpleaños.
Hace un año Maracaibo se conmocionó cuando en el baño de su residencia, ubicado en La Florida, calle 95, de Cañada Honda, fue hallado el cuerpo sin vida de Carmen Segunda Ramírez Pineda, manos inescrupulosas la asfixiaron con una bolsa plástica, cortando su aliento de vida.
La abuela de La Florida, vivía sola, su casa grande y con muchos cuartos disponibles, fue puesta por ella misma en provecho, alquilando habitaciones, sin saber que en este grupo de personas que entraban y salían estarían sus propios verdugos, los que de manera cruel la asesinaron, para llevarse lo poco de valor que había en la casa, sin pesar en la consecuencia trágica de este acto de maldad pura.
Joselyn Isamar Torrealba y José Daniel Fonseca Montiel, alias «El Chicho» fueron vinculados a este hecho, sin que aun, a un año de este hecho hallan sido capturados.
Hoy la historia se revive, las lágrimas corren como el primer día y los familiares reunidos ahora en oración por el eterno descanso de su alma, exigen justicia, pues los responsables de este hecho aun siguen en libertad y quien sabe sin en acecho de otra probable víctima.
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