martes 30 de abril de 2024

#Opinión Unidad, integración y respeto (Leonardo Pérez Álvarez)

Estas son tres palabras que considero fundamentales si queremos rescatar la patria en todo el sentido amplio de ese verbo.

Ciertamente en el país existe una crisis económica, social, de servicios públicos, de la salud y alimentaria, es real, se vive a diario en todos los sectores sociales del país, cada quien a su manera y medida lo siente, de la misma manera estoy convencido que de todas estas situaciones se pueden salir, se pueden superar.

Sin embargo, existe una crisis superior que debemos controlar para que podamos realmente rescatar al país. A mi juicio, la principal afectación que tenemos es la de la exclusión, la división, inclusive el odio.

Escuchar de diferentes dirigentes políticos, sociales y ciudadanos de cualquier posición y militancia partidista frases como “hay que salir de esta gente”, “ojalá se fueran”, “hay que acabar con ellos”, “los odio”, es realmente alarmante y es allí donde se siembra y desarrolla la verdadera crisis nacional.

Estoy seguro que con el cambio del modelo político la economía florecerá rápidamente, Venezuela es un país de grandes oportunidades y múltiples recursos naturales y humanos; probablemente un gobierno diferente se avocaría a solucionar o al menos a atender los servicios públicos, la producción alimentaria, el desempleo, la atención médica y de esa manera la vida aquí fuera normal.

Ahora bien, habiendo ya superado esos escollos, el principal movimiento para la verdadera reconstrucción y rescate nacional está en nosotros, comenzando por aceptar, comprender y entender que todos somos necesarios, que los de una posición son requeridos para que el de la otra postura exista; que quien corresponda gobernar debe comenzar por el rescate humano de todos nosotros, la tolerancia es un valor fundamental para cimentar la convivencia en paz y armonía.

Pensar o creer que excluyendo a quien simplemente es diferente a nosotros hará que las cosas funcionen por ese motivo, es un error de inmensas magnitudes. Yo pienso de una manera y eso está bien, así como cualquier otra persona piensa y actúa a su manera también está bien. Precisamente gracias a nuestras propias diferencias naturales es que la humanidad misma ha podido progresar, de hecho, solo la unión entre hombre y mujer, dos seres diferentes, es lo que permite que la vida se prolongue.

En los tiempos actuales, ante la dinámica socio política actual, un sector de la sociedad ha convocado a la constitución de un frente amplio nacional, con apertura para todos los sectores, inclusive al que llaman el “Chavismo disidente”, con la intención de ejercer acciones que alcancen el objetivo de cambiar al presidente y el modelo político, hablan de

hacer las cosas bien y evitar caer en los errores cometidos en tiempos anteriores a través de la Coordinadora Democrática y la MUD; le dan garantía porque este es un movimiento de la “sociedad civil”,

Ante este tema de la paternidad del movimiento me pregunto, ¿decir que es de la sociedad civil con participación de los partidos es incluyente o excluyente? Invito a quienes allí participan tengan cuidado con el poder de la palabra utilizada.

Yo aplaudo las iniciativas sociales, soy de los que piensa que el ciudadano debe ser coprotagonista de todos los hechos de la sociedad; y reconozco lo variopinta que somos los venezolanos, los distintos sectores de la vida nacional participando, cada uno haciendo lo que le corresponde y cumpliendo el rol para el cual fue creado y que a su vez se pueda sincronizar con los demás sectores para que así el sistema país avance, es decir unido e integrado.

Actualmente Venezuela necesita de la participación de toda la sociedad civil, en donde se encuentran los partidos políticos, todos somos necesarios, el jugar a excluir solo traerá más desbalance y desequilibrio social. Trabajemos en unidad, juntos, con respeto a las decisiones mayoritarias. Recordemos que una cosa es la unidad y otra la unanimidad; en la fracción opositora se juega con mucho individualismo autocrático, donde si no se está de acuerdo con las decisiones mayoritarias por el mero hecho de creerme dueño de la razón despotrico del otro, donde es más fácil excluir que sumar y al final, donde no hay respeto por la normativa

Por ello mi invitación a trabajar unidos, reconociendo el importante papel del otro aun siendo distinto a mi, sumar, ir anexando gente a la idea del verdadero rescate y muy importante, con respeto a las normativas y reglas.

Que todo sea para nuestro mayor beneficio colectivo; que el bien mayor triunfe y que todo seamos UNO.

NAM/Leonardo Pérez Álvarez /@leoperez74/ [email protected]