El atacante Adalberto Peñaranda ha vuelto a dejarse ver en Málaga, ciudad donde disputó la ultima parte de la temporada pasada previo al Mundial Sub-20.
El futbolista criollo regreso a tierras andaluzas para ponerse a las órdenes de los servicios médicos del club blanquiazul para continuar su recuperación de la lesión que sufrió en la final del Mundial Sub-20 de Corea del Sur, ante Inglaterra, en el quinto metatarsiano de su pie izquierdo.
Tal como informa “El Desmarque”, el venezolano se pasó por el interior del estadio Ciudad de Málaga para comunicarle con su entrenador Michel y a los doctores como iba su lesión desde que se operó sorpresivamente hace unos días en Roma, capital de Italia. Desde hace dos días se ha incorporado a la disciplina del Málaga y se ha dejado ver con muletas en los entrenamientos del equipo.
Peñaranda tiene aún vigente su contrato de sesión con el conjunto malagueño, por lo que debía regresar para continuar recuperándose de la lesión que lo dejará fuera de los terrenos de juego durante los próximos dos o tres meses.
Michel no cuenta con el atacante merideño, pero la lesión hace más difícil terminar con el contrato que tienen hasta el final de la temporada 2017-2018. Peñaranda ocupa una de las tres plazas de extracomunitarios, por lo que hace imposible hacer contrataciones de jugadores foráneos.
Peñaranda no sabe donde va a jugar la siguiente temporada
Su futuro es incierto y al estar en el dique seco no puede luchar por la posibilidad de ganarse un puesto; además algunos equipos, como el Leganés (equipo donde jugó la temporada pasada el venezolano Darwin Machis), han mostrado interés en contar con el criollo, sien embargo la lesión también atrasa cualquier intento de cambiar de aires. Por ahora, tendrá que concentrarse en recuperarse de una lesión que ha trastocado, y mucho, tanto sus planes como los del Málaga.
NV1/Meridiano
