sábado 20 de abril de 2024

¿DECISIÓN ACERTADA? El Tottenham despide a Mourinho

El Tottenham Hotspur hizo oficial la salida de José Mourinho del cargo de entrenador del primer equipo, noticia que ha pasado por debajo del tapete debido a la Superliga Europea, UEFA, FIFA y todo lo que se está generando entorno a la decisión de crear un torneo de élites, siendo los Spurs uno de los fundadores de la misma.

Pero, dentro de una coyuntura complicada, tenemos que enfocarnos en lo que fue el proceso del entrenador portugués en el conjunto del Norte de Londres y analizar la situación para medir si es buena o mala la decisión del club.

Mourinho llegó al Tottenham el 20 de noviembre del 2019 y, desde ese momento hasta el día de hoy, dirigió 86 partidos en todas las competiciones, números inferiores a lo que hizo en todos sus cargos anteriores, solo superando los 10 que dirigió en el Benfica y los 23 en el Leiria antes de llegar al Porto.

Los números de Mou en el Tottenham:

-86 partidos entrenados

-45 victorias

-17 empates

-24 derrotas

Pero, más allá de sus números, tenemos que revisar un poco más a fondo lo que ha perdido el conjunto londinense en todo este tiempo:

-Eliminado de la Champions League 2019/20 ante el RB Leipzig se manera humillante.

-No clasificó a la UEFA Champions League actual.

-Eliminado de la UEFA Europa League 2020/21 ante el inferior Dinamo Zagreb después de ganar la ida 2-0 como local.

-Lejos de los puestos de clasificación a la UEFA Champions League vía Premier League esta temporada.

Es complicado, después de ver cada uno de estos puntos, rechazar la decisión tomada por la directiva del club pero es que si ampliamos el espectro nos damos cuenta que la situación es mucho peor.

Mourinho, más allá de la primera parte de la temporada actual, nunca logró dar con la tecla a nivel de funcionamiento colectivo.

El Tottenham es un equipo dependiente de Heung-Min Son y Harry Kane, si ellos no estaban a un nivel alto o si estaban bien referenciados, el equipo perdía y dejaba la sensación de que no había ideas para ganar. A nivel defensivo es mucho peor. No parecía un equipo de Mourinho, que siempre se destacó por potenciar piezas en este sentido y confeccionar una estructura sólida sin pelota. Pero no lo hizo.

La culpa no es solo de José Mourinho y eso hay que tenerlo en cuenta (bajos rendimientos de jugadores importantes dentro del club) pero es que el portugués tampoco tuvo el efecto necesario para levantar al equipo. Y lo peor de todo es que se le confeccionó un equipo para hacerlo con fichajes importantes en el mercado de fichaje de verano.

Mourinho no es el único culpable de la separación

La decisión, teniendo en cuenta todo esto, es más que acertada aunque también significa que, a menos que pase un milagro, el Tottenham dejará que esta temporada termine como sea para después recomenzar su proyecto. No se le puede pedir al entrenador interino que gane todos sus partidos hasta que termine la campaña.

Pero no solo podemos culpar a Mourinho de todo esto. El Tottenham destrozó su proceso primero con la destitución de Mauricio Pochettino, el creador de este equipo y quien lo llevó a la cima, y después contratando a un entrenador que trabaja de una manera totalmente diferente. Mourinho y Pochettino son como agua y aceite en la manera de plantear partidos, gestionar plantillas, transmitir su idea…

Daniel Levy, presidente del club, contrató a Mourinho para ganar títulos pero se olvidó de las formas con las que compitió por la Premier League y jugó la final de la UEFA Champions League. Sin continuidad no hay crecimiento.

La relación Mourinho-Tottenham estaba destinada a separarse y de esta manera. Un matrimonio corto y con un divorcio doloroso.

NAM/Javier Parra Peña