Maracaibo, cuna de una historia incomparable, está de cumpleaños. La capital del estado Zulia arriba a 493 años donde ha forjado su propia identidad con influencias de múltiples culturas. Una mezcla que le da un carácter que la eleva a un sitial de referencia para toda Venezuela e incluso de Latinoamérica.
Con estos rasgos tan particulares se ha levantado una serie de obras que forman parte de su orgullo regional y que quienes visitan la ciudad deben visitar para tener una experiencia especial sobre la ciudad.
Acá te presentamos un grupo de obras arquitectónicas que explican el crecimiento de la ciudad y que demuestran la grandeza de capital pionera.
La Casa Morales o Casa de la Capitulación
Es la única residencia netamente colonial que subsiste en el caso central de Maracaibo. Su data de construcción se estima éntrelos años 1790 y 1800 la cual sirvió como casa de gobernadores del Imperio español.
El último de los representantes españoles que la ocupó fue el Capitán General español en Venezuela, el Comandante Francisco Tomás Morales, quien a través de sus delegados militares, el Coronel José Ignacio de Casas y el Teniente Coronel Lino López Quintana, firmó la Capitulación del Reino español en tierra venezolana luego de la derrota sufrida en la Batalla Naval del Lago de Maracaibo, el 24 de julio de 1823. La firma se produjo el 3 de agosto ante los representantes patriotas teniente Coronel José María Delgado, Comandante del Batallón Zulia y el Capitán de la Comandancia General del departamento Zulia, José María Urdaneta.
Catedral Metropolitana de Maracaibo
Otra joya arquitectónica que perdura en el casco central de Maracaibo es la catedral de Maracaibo, sede eclesial de la Arquidiócesis de Maracaibo, por lo tanto es la iglesia matriz de la fe católica del Zulia.
Su nombre institucional correcto es «Santa Iglesia Catedral Metropolitana de los Bienaventurados Apóstoles San Pedro y San Pablo», que se levantó en el siglo XVII, convirtiéndose en una de las iglesias más antiguas de Latinoamérica.
A través de la Bula del Papa León XIII, firmada el 25 de julio de 1897 se formaliza su categoría de Catedral al igual que el Palacio Arzobispal de la Arquidiócesis de Maracaibo cuya construcción es más reciente.
El Palacio de Gobierno Regional o Palacio de los Cóndores
Es el símbolo arquitectónico del poder regional cuya construcción fue iniciada por el gobernador José Escolástico Andrade en el año 1841 y se terminó aproximadamente en 1868 en una primera etapa.
Pasó de ser la casa del cabildo local y la cárcel de la ciudad en una obra de majestuosidad en medio de la casas del viejo Saladillo.
El reconocimiento como Palacio de Los Cóndores fue posterior a su edificación 1926 cuando el General Vicencio Pérez Soto ordena trabajos de remodelación donde incluyen en sus extremos este y oeste dos esculturas de las aves que le dieron su nueva identidad.
Pintoresca y divertida así es la Calle Carabobo
La calle Carabobo se mantiene como la representación genuina del Maracaibo de antaño. Sus casas de estilo colonial conservan las características de un estilo arquitectónico que se fundamentó en darle frescura a las residencias de quienes hicieron grande a la ciudad costera que sirvió de punto de difusión de cultura para muchos pueblos del Pacífico sudamericano.
Hoy en día pocas son las casas que conservan vecinos. Se han multiplicado allí espacios para el fomento de la cultura, el entretenimiento y el comercio.
Visitarla es transportarse a una época mágica de la ciudad que se alimenta con los vívidos colores de sus frentes y grandes ventanales, detalles estructurales que le imprimen un rasgo propio y único en toda Venezuela.
Y sobre todo pasear por un lugar que también fue admirado y pisado por tantos insignes maracaiberos.
Honor a un insigne zuliano: hospital Central Dr. Urquinaona
Es una de las edificaciones con más historia y tradición de la ciudad del Sol Amada.
Fue el primer hospital de Maracaibo que se conoció como primeramente como Hospital de Santa Ana el cual fue inaugurado el 26 de julio de 1608. Luego se instaló allí la “Casa de la Beneficencia” por fomento del insigne jurista, educador y filántropo zuliano doctor Antonio José Urquinaona Bracho, quien trabajó para albergar a una gran cantidad de mendigos y desamparados que deambulaban en las calles del casco central.
Posteriormente la obra fue renombrada en homenaje al político como Hospital Central de Maracaibo Dr. Urquinaona.
La ermita de Santa Ana
Esta capilla católica fue remozada por los fundadores del Hospital del mismo nombre y que hoy se conoce como Hospital Central de Maracaibo Dr. Urquinaona, los esposos Francisco Ortiz e Inés del Basto.
Su construcción de bahareque y techos de enea, es anterior a la del hospital y data de 1607.
La pareja española trajo figuras del reino de España de Santa Ana, San Joaquín, la Virgen de la Soledad, San Juan y la Magdalena así como varios cuadros al óleo.
Más de un siglo después, en 1737, se realiza una intervención profunda para darle más robustez a la obra por lo que se construyen nuevas paredes con piedra de ojo y mezcla de cal.
A lo largo del tiempo se han hechos trabajos de remodelación y de mantenimiento y su interior es poco conocido por las nuevas generaciones. Actualmente es una capilla filial de la Catedral de Maracaibo.
La casa de la Madre del Zulia
El hoy Santuario Mariano Basílica de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá y San Juan Dios se levantó sobre la ermita de san Juan de Dios que fue construida por iniciativa del capitán español Juan de las Nieves Andrade, en julio de 1686.
La edificación católica es la más visitada de todas las iglesias que comprenden la jurisdicción de la Arquidiócesis de Maracaibo dado que es el epicentro de la fe zuliana y de muchos creyentes nacionales internacionales.
La estructura actual fue inaugurada en 1943 y consta de tres naves de estilo neoclásico y dada su importancia para la ciudad, el estado y el país es declarada como patrimonio histórico del estado Zulia.
De mercado a casa cultural
El actual Centro de Arte de Maracaibo – Lía Bermúdez es una de las edificaciones más emblemáticas del casco central de la capital zuliana.
Pasó de ser epicentro del comercio local de diversos rubros de alimentos, conocido como Mercado de los ventorrillos o Mercado de Los Buchones, luego fue el Mercado Central de Maracaibo hasta convertirse en una de las casas de cultura con mayor resonancia e importancia para esta capital hoy en día.
Su estructura fue instalada en la década de los años 20 del siglo pasado y en 1993 pasa a ser CAM – LB, luego de un profundo trabajo de remodelación y de adecuación de sus espacios.
Enclavado en la plaza Baralt el CAM –LB es una referencia obligada para el turista que visita Maracaibo.
Estas obras realzan la historia de una ciudad que puja por levantarse y retrata el crecimiento de una capital que tiene una identidad propia abrazada por su lago.
Existen otras tantas obras que manifiestan lo que es la ciudad del Sol Amada pero acá mostramos las que nacieron bajo el concepto de crecimiento enmarcado en el desarrollo que impuso la llamada cuadrícula española, que, a partir de la plaza mayor o central, establecía sus órganos de gobierno y de instituciones a su alrededor y luego se iba expandiendo en sus cuatro puntos cardinales de acuerdo a la importancia de sus habitantes.
NAM – Edgar Bolívar
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